La minería y la industria en Barcelona son fundamentales para su desarrollo económico y social.
La provincia destaca por su producción minera, siendo reconocida por la extracción de sales potásicas en lugares como Cardona y Suria, así como por sus aguas mineromedicinales.
En el ámbito industrial, predominan las fábricas familiares, que, aunque pequeñas, contribuyen significativamente al consumo de energía eléctrica y al aprovechamiento de los recursos hídricos locales.
minería e industria en Barcelona
La importante producción minera otorga a Barcelona un lugar destacado entre las provincias españolas. Barcelona puede decirse que ostenta la exclusiva de las sales potásicas con los yacimientos de Cardona (La Coromina) y los de potasa de Suria y Sallent. Cuenta con aguas minerales y mineromedicinales en Caldas de Estrach y de Montbuy (termales), La Garriga y Argentona. El lignito (segundo lugar de España) se beneficia en Berga, en las cuencas de Calaf y San Mateo de Bages; la bauxita, en Santa María de Miralles.
La industria barcelonesa, importantísima, se caracteriza por el predominio de la fábrica familiar, relativamente pequeña, lo que no quiere decir que no cuente la provincia con algunos de los más importantes complejos industriales españoles, y por el extraordinario consumo que realiza de energía eléctrica. Los ríos catalanes, aunque cortos, están explotados concienzudamente y poseen excelentes condiciones para el aprovechamiento hidroeléctrico por su pronunciado desnivel. De todos modos la provincia produce menos electricidad de la que consume.
Hablar de industria barcelonesa, es hablar en cierto modo de industria textil: más de 300 sociedades anónimas trabajan en tejidos de algodón, seda, yute, celulosa, lana, fibras artificiales, etc. También es importante la metalurgia pesada, a pesar de no abundar en la provincia ni el carbón ni el hierro. En la capital se ha desarrollado considerablemente la fabricación de automóviles, motores de aviación, motores eléctricos, locomotoras, vagones de ferrocarril y motores navales. Siguen a continuación las industrias químicas, abonos principalmente, y las alimenticias, imprescindibles para abastecer a la densa población de la provincia. Las principales ciudades industriales son la capital, naturalmente, con Hospitalet, Badalona, Sabadell, Tarrasa, Mataró, Manresa, Berga, Villanueva, Igualada, etc.