Mitómano y mitómana son términos que describen a personas que padecen de mitomanía, un trastorno psicológico que se caracteriza por la compulsión de mentir de forma patológica y constante.
Los mitómanos inventan historias, exageran logros y distorsionan la realidad con el objetivo de llamar la atención, ganar admiración o evadir responsabilidades.
La mitomanía es un trastorno psicológico que se caracteriza por la tendencia compulsiva a mentir de manera patológica y constante, sin importar las consecuencias o la veracidad de lo que se dice.
Un mitómano tiende a inventar historias, exagerar logros o situaciones, y distorsionar la realidad con el fin de llamar la atención, ganar admiración o escapar de responsabilidades.
Los mitómanos suelen ser hábiles manipuladores y pueden llegar a creer sus propias mentiras, lo que dificulta detectar cuándo están mintiendo. Este comportamiento puede generar conflictos en sus relaciones personales, laborales y sociales, ya que la falta de credibilidad y la desconfianza que generan pueden afectar su reputación y su entorno.
Ejemplos de uso: "Mi amigo es un mitómano, siempre inventa historias increíbles para impresionar a los demás".
"No confíes en él, es un mitómano que distorsiona la realidad constantemente".
"Es difícil mantener una relación con un mitómano, ya que su falta de credibilidad genera desconfianza".
"El jefe descubrió que uno de los empleados era un mitómano y decidió despedirlo por su comportamiento manipulador".