El término mogollar proviene del español boliviano y se refiere a la acción de trampear, que implica engañar o manipular para obtener algo, especialmente en el contexto de pedir prestado.
Esta palabra también se utiliza de manera familiar para describir el acto de petardear, es decir, hacer trucos o artimañas para conseguir un beneficio.
Su uso refleja una cultura donde la astucia y el ingenio son valorados en situaciones cotidianas.