Monopsonio es un concepto económico que describe una situación de mercado en la que existe un único comprador que tiene un control significativo sobre las transacciones comerciales.
En este escenario, el comprador se convierte en una especie de monopolio de demanda, ya que su poder de negociación le permite influir en los precios y condiciones de compra de los bienes y servicios ofrecidos por múltiples vendedores.
Esta dinámica puede tener implicaciones importantes en términos de competencia, precios y distribución de beneficios en el mercado.
m. En Economía, situación del mercado en donde hay solamente un comprador. Desde el punto de vista del comprador es un monopolio de demanda.
Funcionamiento del monopsonio
Es una estructura de mercado en la que un único comprador controla sustancialmente el mercado como principal comprador de los bienes y servicios ofrecidos por muchos posibles vendedores.
En la teoría microeconómica del monopsonio, se supone que una sola entidad tiene poder de mercado sobre los vendedores como único comprador de un bien o servicio, de manera muy parecida a como un monopolio puede influir en el precio para sus compradores en un monopolio, en el que un solo vendedor se enfrenta a muchos compradores.
Historia del monopsonio
La teoría del monopsonio fue desarrollada por la economista Joan Robinson en su libro The Economics of Imperfect Competition (1933).
Los economistas utilizan el término "poder monopsónico" de manera similar al "poder de monopolio" como una referencia abreviada para un escenario en el que hay un poder dominante en la relación de compra, de manera que el poder es capaz de fijar precios para maximizar los beneficios no sujetos a restricciones competitivas.
El poder de monopolio existe cuando un comprador se enfrenta a poca competencia de otros compradores por esa mano de obra o ese bien, de modo que puede fijar los salarios y los precios de la mano de obra o los bienes que compra a un nivel inferior al que se daría en un mercado competitivo.
Un ejemplo teórico clásico es el de un pueblo minero, donde la empresa propietaria de la mina puede fijar salarios bajos ya que no se enfrenta a la competencia de otros empleadores en la contratación de trabajadores, porque es el único empleador del pueblo, y el aislamiento geográfico o los obstáculos impiden que los trabajadores busquen empleo en otros lugares.
Otros ejemplos más actuales pueden ser los distritos escolares en los que los maestros tienen poca movilidad entre los distritos. En esos casos, el distrito se enfrenta a poca competencia de otras escuelas en la contratación de profesores, lo que le da al distrito un mayor poder a la hora de negociar las condiciones de empleo. Las condiciones alternativas son la oligopsonia o la competencia monopsónica.
Etimología u origen de la palabra monopsonio: Del prefijo mono- (único) y del griego opsonia ("aprovisionamiento, compra"). El término fue introducido por primera vez por Joan Robinson en su influyente libro, The Economics of Imperfect Competition, publicado en 1933. Robinson acreditó al académico de los clásicos Bertrand Hallward de la Universidad de Cambridge con la acuñación del término.