Los monosacáridos son los azúcares más sencillos y fundamentales en la química de los hidratos de carbono.
Se clasifican principalmente en pentosas, que contienen cinco átomos de carbono, y hexosas, que tienen seis.
Un ejemplo destacado es la glucosa, un monosacárido esencial en el metabolismo de los organismos, ya que proporciona energía vital, especialmente para el cerebro, que depende de ella para funcionar correctamente.
Son los azúcares más sencillos. Los más importantes de este grupo son las pentosas, que contienen cinco átomos de carbono en su molécula, y las hexosas, que tienen seis. El prefijo denota el número de átomos de carbono por molécula y el sufijo -osa, indica que la sustancia es un azúcar. La glucosa o Dextrosa es un importante monosacárido perteneciente al grupo de las hexosas; interviene en los procesos del Metabolismo y todos los organismos parecen capacitados para utilizarla; de ella están formados el almidón, el glicógeno y la celulosa. Las células del cuerpo utilizan la glucosa de la sangre y de los líquidos tisulares para producir energía. El cerebro parece depender del metabolismo de los hidratos de carbono para desarrollar sus actividades y deja de funcionar adecuadamente cuando la glucosa de la sangre desciende por debajo de la cifra normal.