• « Ahora, en cambio, a cada montador se le asignaba nada más una o dos de las múltiples operaciones diferentes que intervenían en el montaje: colocar un imán y apretar un par de tuercas, para empezar, antes de que el montaje se empujara hacia el obrero vecino. »
• « Hasta entonces, el montador de magnetos había trabajado en un banco, utilizando una variedad completa de imanes, tornillos y abrazaderas, y lograba armar alrededor de 40 magnetos completos en las nueve horas de trabajo diario. »