La palabra morilla tiene un significado que evoca una advertencia sobre los peligros de asumir riesgos excesivos.
En su uso popular, se refiere a la historia de alguien que, al arremangarse o lanzarse a una situación desafiante, termina siendo devorado por los lobos, simbolizando las consecuencias de actuar sin medir las fuerzas propias.
Esta expresión se utiliza para reprender a quienes se aventuran en situaciones que superan sus capacidades.