La mortificación es un término que se refiere a la acción y efecto de mortificar, ya sea a uno mismo o a otros.
Implica un proceso de sufrimiento o humillación que puede ser físico o emocional.
Además, se relaciona con aquello que causa este tipo de dolor o incomodidad.
En su esencia, la mortificación abarca tanto el acto de infligir sufrimiento como la experiencia de sentirlo, reflejando una profunda conexión con el sufrimiento humano.