El término morucho se refiere a un novillo que ha sido preparado y embolado para ser lidiado en espectáculos taurinos.
Este tipo de animal es seleccionado por su tamaño y características, lo que lo convierte en un desafío para los aficionados que participan en la lidia.
La figura del morucho es emblemática en la cultura taurina, simbolizando tanto la tradición como la emoción de la fiesta brava.