La palabra nema se refiere a un cierre o sello que se utiliza en las cartas para asegurar su contenido.
Este elemento no solo cumple una función práctica al mantener la privacidad del mensaje, sino que también puede tener un valor simbólico, representando la confianza entre el remitente y el destinatario.
Así, la nema se convierte en un pequeño pero significativo detalle en la comunicación escrita.