El término oficial verdugo se refiere a la figura que actúa como ejecutor de la justicia en contextos donde se aplican penas capitales.
Este rol, que históricamente ha estado asociado a la ejecución de condenas, implica una responsabilidad significativa en el sistema judicial.
La figura del verdugo no solo representa la aplicación de la ley, sino también un complejo debate sobre la moralidad y la ética en la administración de justicia.