El término osecico, así como sus variantes osecillo y osecito, se refiere a una pieza dura que compone el neuroesqueleto de los vertebrados.
Estas estructuras son fundamentales para la protección y soporte del sistema nervioso.
En el contexto de la anatomía, el uso de estas palabras resalta la importancia de los huesos en la conformación del cuerpo y su función vital en la movilidad y estabilidad de los organismos.