El término padre de la Iglesia se refiere a un escritor eclesiástico de los primeros siglos del cristianismo, cuya vida y enseñanzas son reconocidas por la Iglesia por su santidad y ortodoxia.
Estos individuos desempeñaron un papel crucial en la formación de la doctrina cristiana y en la defensa de la fe, contribuyendo al desarrollo espiritual y teológico de la comunidad cristiana primitiva.