El término paludamento se refiere a un manto de púrpura adornado con oro, utilizado por los caudillos romanos durante sus campañas.
Este atuendo no solo simbolizaba el poder y la autoridad de los líderes militares, sino que también reflejaba la riqueza y el estatus de Roma en la antigüedad.
El paludamento se convirtió en un emblema de la grandeza y el orgullo de aquellos que lo portaban en el campo de batalla.