El término pardisco y su variante pardisca se utilizan para describir un color que se asemeja al pardo, es decir, un tono que mezcla matices de marrón y gris.
Esta palabra se relaciona con la idea de un color apagado y terroso, evocando imágenes de la naturaleza y su diversidad cromática.
Así, el uso de "pardisco" y "pardisca" permite referirse a tonalidades que son menos intensas y más sutiles.