El término partido robado se refiere a una situación en la que un juego se desarrolla de tal manera que resulta extremadamente ventajoso para una de las partes, dejando a la otra sin posibilidades de defensa.
Esta expresión puede aplicarse en diversos contextos, donde la desigualdad en las condiciones de juego genera una experiencia injusta o desequilibrada.
Para comprender mejor este concepto, es recomendable explorar también la definición de partido.