La palabra pelambrusca se utiliza en Cuba para referirse a una mujer de conducta libertina o ramera.
Este término, que puede tener connotaciones negativas, describe a alguien que actúa de manera desinhibida en sus relaciones amorosas o sexuales.
Su uso refleja aspectos culturales y sociales específicos de la isla, donde el lenguaje popular a menudo incorpora términos que aluden a comportamientos y actitudes en el ámbito de la sexualidad.