El término perero se refiere a un instrumento que se utilizaba en el pasado para mondar frutas como peras y membrillos.
Este utensilio era esencial en la preparación de estas frutas, facilitando su consumo y conservación.
Aunque hoy en día su uso ha disminuido, el perero representa una parte de la tradición agrícola y culinaria, recordándonos las técnicas de antaño en la manipulación de alimentos.