La peristalsis es un proceso esencial en el sistema digestivo y otros órganos como el esófago, intestino delgado, colon y conductos biliares.
Consiste en contracciones musculares rítmicas que permiten el avance de alimentos y líquidos a lo largo del tracto gastrointestinal.
Estas contracciones son involuntarias y se producen de forma secuencial, empujando el contenido hacia adelante mediante ondas de contracción y relajación.
Este movimiento es crucial para la digestión y absorción de nutrientes, facilitando el paso de alimentos, contribuyendo a la mezcla y trituración en el proceso digestivo.
Consiste en una serie de contracciones musculares rítmicas y coordinadas que permiten el avance de los alimentos, líquidos u otras sustancias a lo largo del tracto gastrointestinal.
Estas contracciones musculares son involuntarias y se producen de manera secuencial, empujando el contenido hacia adelante a través de ondas de contracción y relajación. Este movimiento peristáltico es fundamental para la digestión y la absorción de nutrientes, ya que facilita el paso de los alimentos a lo largo del tubo digestivo y contribuye al proceso de mezcla y trituración.
La peristalsis también cumple un papel importante en la eliminación de desechos del organismo, ya que ayuda a impulsar los residuos hacia el recto para su posterior expulsión. Además, este proceso contribuye a prevenir el estancamiento de alimentos o líquidos en el sistema digestivo, evitando posibles obstrucciones o problemas de motilidad intestinal.