El término perro jíbaro se refiere a un tipo de perro que se ha adaptado a la vida montaraz en Cuba.
Estos animales, a menudo criados en entornos rurales, son conocidos por su resistencia y habilidades para sobrevivir en la naturaleza.
Su comportamiento y características físicas pueden variar, pero comparten un vínculo especial con el entorno que los rodea, reflejando la rica cultura y biodiversidad de la isla.