La expresión piel de gallina se refiere a la erección de las papilas de la piel, que ocurre como respuesta al frío o a una intensa emoción.
Este fenómeno es una reacción natural del cuerpo, donde los pequeños músculos en la base de los folículos pilosos se contraen, creando una textura similar a la de la piel de un ave.
La sensación puede estar asociada a momentos de sorpresa, miedo o incluso admiración.