El término piojo pegadizo se utiliza de manera figurada y familiar para describir a una persona que resulta difícil de alejar o quitarse de encima, como un piojo que se adhiere a la piel.
Esta expresión evoca la idea de alguien que se aferra a otro, generando una sensación de incomodidad o molestia.
La imagen del piojo resalta la naturaleza persistente y invasiva de esta compañía no deseada.