La población de Cuba ha sido moldeada por su composición étnica, el reparto de grupos y su evolución histórica.
Al llegar los españoles, encontraron tres grupos indígenas: guanajatebeyes, siboneyes y tainos, cuya población disminuyó drásticamente debido a enfermedades traídas por los europeos.
Para suplir la falta de mano de obra, se introdujeron unos 75,000 esclavos africanos, lo que transformó la demografía de la isla y permitió un crecimiento lento hasta alcanzar 171,000 habitantes en 1774.
población de Cuba: composición étnica, reparto y evolución histórica
Los españoles encontraron al llegar a la isla tres grupos de indígenas: guanajatebeyes, siboneyes y tainos. Su número disminuyó rápidamente al contacto con los europeos por el contagio de enfermedades para las que no estaban preparados fisiológicamente, pero en cualquier caso su número parece que era escaso, posiblemente no superior a los 15000. Para compensar esa escasez de mano de obra, tan necesaria en el cultivo de la tierra y por la indolencia característica de los indígenas, se vieron los españoles obligados a introducir en la isla unos 75000 esclavos africanos en el periodo comprendido entre 1512 y 1774. Al conquistador de Cuba, Diego de Velázquez, sólo le acompañaban en su empresa (1512) unos 300 hombres; los aportes hispanos posteriores y la inmigración de los esclavos negros permitió un crecimiento lento de la población que alcanzó 171000 h en 1774, de los cuales el 25 % eran negros. Causa fundamental del escaso crecimiento demográfico fue el carácter de lugar de paso que tuvo Cuba para los colonizadores, que hicieron de ella nada más una base para sus expediciones de descubrimiento, conquista y colonización de los territorios de tierra firme.
Surgieron, sin embargo, en el primer siglo de la dominación española algunas ciudades, entre las que destacaron: La Habana (que llegó a concentrar la mitad de la población insular), Baracoa, Bayamo, Santiago de Cuba, Sancti Spiritus, Trinidad, San Juan de los Remedios, Guanabacoa y otras.
A partir de 1774 y hasta el comienzo de la guerra de la independencia cubana (1861) varias causas contribuyeron a un aumento más rápido de la población: la creación de la industria azucarera, la apertura de vías de comunicación y, finalmente, el establecimiento de los ferrocarriles. La economía azucarera reclamaba mano de obra abundante, que encontró en centenares de miles de esclavos africanos y decenas de miles de chinos. Así, en 1861, la población ascendía a 1 000 000 h, de los que el 53 % eran blancos (criollos españoles en su mayor parte), el 27,5 % africanos esclavos, el 16,7 % africanos libres y el resto chinos. La procedencia de los negros africanos -calculados en 1000000 entre 1790 y 1880- era muy variada: mandingas del Senegal, gangas de la zona comprendida entre el Senegal y el Volta, lucumíes de la zona del Níger, congos de la cuenca del río homónimo. Los chinos llegaron en número de 135000 entre 1847 y 1873 y aunque su título era el de «colonos» se trataba prácticamente de esclavos. Desde la abolición de la esclavitud en 1880 Cuba se convirtió en un crisol de pueblos, con predominio hispánico. La población urbana aumentó mucho en la primera mitad del siglo xix y en 1861 La Habana contaba con 150000 h; Matanzas, con 30000; Puerto Príncipe, con 26000; y Santiago de Cuba con 24000. Al producirse la independencia cubana (1899), la población de la isla era de 1573000 almas, en un 67 % de raza blanca y con notable predominio de criollos sobre españoles y extranjeros. En los primeros treinta años del siglo XX el crecimiento demográfico fue vertiginoso, gracias a las medidas de salubridad que terminaron con las epidemias y al auge de la industria azucarera. El número de inmigrantes entre 1900 y 1920 superó el millón, en su mayor parte españoles. El censo de 1931 dio la cifra de 3962000 h, con un fuerte crecimiento urbano: La Habana, 520000 h, Santiago de Cuba, 101000; Camagüey, 62000; Cienfuegos, 50000; y Matanzas, 47000 habi-tantes.
La disminución de inmigrantes en el periodo posterior se ha compensado por un mayor aumento vegetativo, y así el censo oficial de 1953 dio la cifra de 5 829 000 h.
Según datos del último censo, la población residente en la isla en el año 2012 fue de 11,167,325 habitantes, unas 10,418 de menos si tomamos como referencia el censo realizado en el año 2002.
El predominio de blancos a mediados del siglo XX era de 72,8 %), más de la mitad de los cuales vivía en las áreas rurales. Los negros representaban un 12,4 %, un 14,5 % de mestizos o mulatos y un 0,3 % de raza amarilla.
Actualmente (2002) los blancos son 65,05% de la población, negros 10,08%; mulatos 24,86%; asiáticos 1 %.
El poblamiento rural se hace en «bohíos» diseminados y únicamente se concentra en las centrales azucareras o en las zonas de cultivo tabacalero. La Carretera Central y la puesta en marcha de cultivos en las zonas central y oriental de la isla han provocado últimamente una migración hacia ellas.