El término pobo se refiere principalmente al álamo blanco, un árbol de gran tamaño que se caracteriza por su tronco recto y su corteza clara.
Este árbol es conocido por su rápido crecimiento y su capacidad para adaptarse a diferentes tipos de suelo.
Además, el pobo tiene un papel importante en la reforestación y en la conservación de ecosistemas, ya que proporciona sombra y refugio a diversas especies.