La palabra portante tiene dos acepciones interesantes.
En su primera definición, se refiere al paso que realizan las caballerías al mover simultáneamente la mano y el pie del mismo lado, un movimiento característico en la equitación.
En un sentido más coloquial y figurado, "tomar el portante" significa marcharse o irse, reflejando una acción de partida o desplazamiento.