El término pregar se refiere a una acción antigua que implica clavar algo, como un clavo, en un cuerpo mediante golpes.
Esta acepción es considerada anticuada y ha caído en desuso en el lenguaje cotidiano.
Aunque hoy en día no se utiliza con frecuencia, su significado evoca una técnica de fijación que era común en épocas pasadas, reflejando la evolución del idioma y las prácticas de construcción.