Los principales cultivos de Argelia son fundamentales para su economía y el comercio exterior.
Entre ellos destacan los cereales, la vid, el olivo y los frutales mediterráneos.
Aunque estos cultivos son predominantes, también se producen hortalizas, verduras, tubérculos, así como plantas industriales como el algodón y el tabaco.
La palmera datilera y la cebada son ejemplos de cultivos que se benefician del clima seco, contribuyendo a la diversidad agrícola del país.
principales cultivos de Argelia
Cereales, vid, olivo y frutales mediterráneos constituyen los cultivos principales, tanto para la economía local como para robustecer el comercio exterior. Eso no excluye sin embargo otros cultivos, como hortalizas, verduras y tubérculos tempranos, plantas industriales como el algodón y tabaco, aprovechamiento de fibras vegetales, como el alfa (variedad del esparto) y una explotación muy interesante de la palmera datilera.
En conjunto los cereales cubren la mitad de la superficie explotada y, aunque se cultivan preferentemente para el consumo local, algunos dejan un pequeño remanente para la exportación. La sequedad del clima favorece el desarrollo de la cebada, que se cultiva además en algunos oasis. La avena y el maíz complementan la producción cerealística. En las llanuras litorales y en los alrededores de las principales ciudades alcanza notable interés el cultivo de frutos tempranos: hortalizas, verduras, patatas. Tienen especial interés las zonas próximas a Argel, Castiglione, Ain Taya, etc.
Mayor importancia comercial tiene la vid. Cultivo impulsado por los franceses, ya que la religión musulmana prohibe el consumo del vino, ha alcanzado tal desarrollo que Argelia. Sus vinos rosados son objeto de activa exportación a Francia para el «refuerzo» de los vinos metropolitanos. El olivo se cultivaba ya en tiempos pretéritos, tanto en la época romana como más tarde durante el dominio árabe, pero los olivos habían degenerado hasta convertirse en silvestres y sólo desde la ocupación francesa han vuelto a ser productivos. Bugía y Cabilia son los principales centros olivareros.
De los frutales hay dos variedades que tienen particular interés: los agrios (naranjas sobre todo), que se obtienen en la zona costera, limones y pamplemusas; y los dátiles, obtenidos en los oasis del desierto sahariano. Constituye el dátil no sólo el principal alimento de los nómadas del desierto, sino también una materia prima para la fabricación de harina de dátiles y un producto de exportación, por la vía Touggourt-Biskra. Tomates, judías, algodón, tabaco, corcho, crin vegetal y una serie larga de frutales (granadas, higos, almendros, uvas, etcétera) completan el cuadro agrario de Argelia.
Los bosques se extienden sobre más de 3 000 000 ha y son las especies principales el pino de Alepo, la encina, el corcho (sobre todo en Constantina), que es en gran parte exportado, la palma productora de la crin vegetal y esa especie de esparto (alfa) que se exporta, pero también se utiliza en las fábricas de papel de Argel.