La probidad es un valor ético que se caracteriza por la honestidad, la integridad y la rectitud en las acciones de una persona.
Se refleja en comportamientos transparentes, justos y alineados con principios morales sólidos, demostrando una hombría de bien y una honradez innegables.
• « Desde la antigüedad, el olivo ha sido el símbolo de los sentimientos nobles y virtuosos. Los antiguos griegos afirmaban haberla recibido de Minerva, la diosa de la sabiduría, y sólo permitían su cultivo a personas honorables y de gran probidad. »