El término pronosticar se refiere a la acción de conocer o conjeturar lo que sucederá en el futuro a partir de ciertos indicios.
Por ejemplo, se puede pronosticar buen tiempo al observar condiciones climáticas favorables.
Además, implica la elaboración de un pronóstico, que es una evaluación anticipada sobre eventos venideros, ya sea en meteorología, economía o cualquier otro ámbito.
Origen etimológico de pronosticar: proviene de la palabra latina tardía prognosticare, de la palabra latina prognosticus, a su vez del antiguo griego προγνωστικός (prognostikos) (que significa "conocimiento de antemano").