El propano es un hidrocarburo saturado que se presenta en estado gaseoso a temperatura ambiente.
Es ampliamente utilizado como combustible en diversas aplicaciones, desde la cocina hasta la calefacción y la industria.
Su versatilidad y eficiencia lo convierten en una opción popular para el suministro de energía, siendo una alternativa más limpia en comparación con otros combustibles fósiles.