El término pucherazo tiene dos acepciones principales.
En su sentido más literal, se refiere a un golpe que se da con un puchero, un utensilio de cocina.
Sin embargo, su uso más común es en el ámbito político, donde dar pucherazo significa contabilizar votos que no han sido emitidos en una elección, lo que implica un acto de fraude o manipulación en los procesos democráticos.