La puerta reglar es un término que se refiere a la entrada principal de un convento o monasterio, específicamente la que permite el acceso a la clausura de las monjas.
Este tipo de puerta simboliza no solo un acceso físico, sino también un umbral entre el mundo exterior y la vida de recogimiento y espiritualidad que llevan las religiosas.
Su importancia radica en el respeto y la solemnidad que representa en la vida conventual.