La palabra punilla tiene un significado particular en el contexto boliviano, donde se refiere a un bol o recipiente que se utiliza para servir alimentos.
En este caso, se asocia con la parte posterior del rancho, un espacio que puede estar destinado a la cocina o al almacenamiento de comida.
Así, la punilla se convierte en un elemento importante en la cultura culinaria de Bolivia, reflejando tradiciones y prácticas locales.