La palabra raleza se refiere a la calidad de ser ralo, es decir, a la característica de algo que es escaso o poco denso.
Este término se utiliza para describir situaciones en las que hay una dispersión o una falta de concentración, ya sea en elementos físicos, como un líquido, o en contextos más abstractos.
La ralidad puede influir en la percepción y el funcionamiento de diversos fenómenos en la naturaleza y en la vida cotidiana.