El término rastrante proviene del verbo rastrar, que se refiere a la acción de seguir o buscar algo a través de un rastro.
Aunque su uso es considerado anticuado y actualmente se encuentra en desuso, en su esencia describe a algo o alguien que tiene la capacidad de rastrear, es decir, de localizar o identificar elementos a partir de pistas o señales.
Su significado evoca la idea de una búsqueda meticulosa y atenta.