También llamada "gato de agua", es una especie de ratonera que se pone sobre un lebrillo o recipiente con agua, donde caen los ratones.
Esta ratonera de agua funciona de una manera muy sencilla pero efectiva. Se coloca un lebrillo o recipiente con agua en un lugar estratégico donde los ratones suelen transitar. La ratonera consiste en un mecanismo que se coloca en el borde del lebrillo, de manera que cuando el ratón intenta acceder al interior, se desequilibra y cae dentro del agua.
Una vez que el ratón cae en el agua, le resulta muy difícil escapar debido al peso de su cuerpo mojado. La ratonera de agua se ha utilizado durante mucho tiempo como una forma efectiva de control de plagas, especialmente en áreas rurales y en granjas, donde los ratones pueden causar daños significativos.
Además de su eficacia para atrapar ratones, esta ratonera también es considerada una opción más humanitaria en comparación con las trampas tradicionales, ya que el ratón no sufre una muerte inmediata y el agua proporciona una forma menos violenta de captura.
En resumen, la ratonera de agua, también conocida como "gato de agua", es una herramienta efectiva y humanitaria para controlar la población de ratones. Su funcionamiento simple pero ingenioso la convierte en una opción popular para aquellos que buscan mantener su hogar o su granja libres de roedores no deseados.