La reculada es un término que se refiere a la acción de recular, es decir, retroceder o dar un paso atrás en una situación determinada.
Este concepto puede aplicarse en diversos contextos, desde el ámbito físico, como en el movimiento de un vehículo, hasta en situaciones más abstractas, como en decisiones o posturas.
La reculada implica una revisión de la posición inicial y puede ser vista como una estrategia para evitar conflictos o adaptarse a nuevas circunstancias.