La recuperación se refiere a la acción y efecto de recuperar o recuperarse, implicando un proceso de restauración o mejora.
En el ámbito industrial, también abarca el aprovechamiento de residuos que antes se consideraban desperdicios, impulsado por la necesidad de revalorizar materias primas escasas.
Un ejemplo específico es la recuperación del estaño, que se obtiene a partir de hojalata vieja mediante un proceso químico.