El término relanzar tiene dos acepciones principales.
En primer lugar, se refiere a la acción de repeler o rechazar algo, como una idea o un proyecto.
En segundo lugar, en el contexto de elecciones por insaculación, significa volver a echar la cédula en el cántaro, lo que implica un nuevo intento de selección.
Ambas definiciones reflejan la idea de dar una segunda oportunidad o de actuar nuevamente ante una situación.