El término retamero y su forma femenina retamera se refieren a lo que es perteneciente a la retama, una planta leguminosa que se caracteriza por sus flores amarillas y su uso en la elaboración de productos tradicionales.
Estas palabras evocan no solo la conexión con la naturaleza, sino también el valor cultural y ecológico de esta especie, que ha sido parte del paisaje y la vida rural en diversas regiones.