El término revocable se refiere a algo que puede ser anulado o cancelado.
En este sentido, se utiliza para describir decisiones, contratos o acuerdos que no son definitivos y pueden ser modificados o revertidos por la parte que los emitió.
La naturaleza revocable de un acto implica que existe la posibilidad de cambiar de opinión o de situación, lo que otorga flexibilidad en diversas circunstancias legales y personales.