La revulsión es un término que se refiere a una irritación local que se provoca con el fin de aliviar la congestión o la inflamación en una parte del cuerpo.
Este proceso también puede tener como objetivo estimular el sistema nervioso.
En contextos médicos, la revulsión se utiliza como una técnica para restablecer el equilibrio en el organismo, generando una respuesta que favorece la salud.