Los ríos y lagos de Austria son elementos fundamentales de su geografía y economía.
La mayoría de sus ríos pertenecen a la cuenca del Danubio, que atraviesa el país de oeste a este, mientras que algunas regiones envían sus aguas al Rin y al Elba.
Estos ríos, caracterizados por ser torrentes de montaña, son caudalosos y rápidos, ideales para la producción de energía.
Además, en sus cabeceras se forman lagos de gran belleza y embalses artificiales.
ríos y lagos de Austria
Austria pertenece, casi íntegramente, a la cuenca del Danubio, que lo cruza de O á E por su zona septentrional. Únicamente el extremo NO, el Vorarlberg, envía sus aguas al Rin, y pequeñas regiones del N envían sus aguas al Elba a través del Moldau. El carácter de los ríos austríacos es el de verdaderos torrentes de montaña, caudalosos, pero rápidos y con fuertes desniveles, que los hacen aptos para la producción de energía; en las cabeceras de sus cuencas forman a veces lagos bellísimos, o pueden utilizarse para la formación de embalses artificiales. El Danubio penetra en Austria procedente de Ba-viera (Alemania), por la localidad de Passau, donde recibe por la derecha al río suizo Inn (con su afluente austríaco el Salzach) que duplica su caudal. Baña Linz, Grein y Viena, y abandona el territorio austríaco hacia Presburgo, después de un recorrido de 350 km. El carácter internacional del Danubio y su fácil navegabilidad le dan una extraordinaria importancia en la vida económica de este país alpino. En su recorrido recibe además, por territorio de Austria, al Traun, que forma en su curso superior el lago de Hallstatt, el Enns con su afluente el Steyr, y el Leitha, que corre bastantes kilómetros paralelo al Danubio. Por la izquierda, y formando frontera con Checoslovaquia, le llegan las aguas del March.
También la vertiente meridional de los Alpes austríacos envía sus aguas al Danubio por medio de los ríos Raab y Mur, engrosado éste por el Murz y por el Drave, que nace en el Tirol oriental y recibe al Isel. Ambos ríos, Raab y Mur, se unen al Danubio fuera de las fronteras de Austria.
Austria es un país rico en lagos, la mayor parte de ellos de tipo alpino. La provincia de Vorarlberg tiene costas sobre el lago de Constanza, también suizo y alemán. En el extremo opuesto del país se encuentra el lago Neusiedler, de características totalmente distintas, pues está en vías de desecación y es de muy escasa profundidad, alimentándose sólo de las lluvias y variando por ello notablemente su nivel según las épocas; amplio (330 km2), recibe el nombre de «Mar de Viena» y es muy visitado por los aficionados a los deportes de la pesca y de la caza. Entre los numerosos lagos de tipo alpino se deben citar los de Atter, Traun, Hallstatt y Grundl en la región de Salzburgo, a la que prestan notable interés turístico, y los de Ossiach, Wórther y Millstatt, en la depresión de Klagenfurt.