El término rogo se utiliza en un contexto poético para referirse a una hoguera o pira.
Esta palabra evoca imágenes de fuego y llama, simbolizando no solo la combustión física, sino también aspectos más profundos como la purificación, el sacrificio o la celebración.
En la literatura, el rogo puede representar momentos de transformación o rituales que conectan lo terrenal con lo espiritual.