La palabra romanilla se refiere a un tipo de cancel corrido, que funciona como una celosía en las viviendas de Venezuela.
Este elemento arquitectónico no solo proporciona privacidad, sino que también permite la circulación del aire y la entrada de luz, creando un ambiente más fresco y luminoso.
La romanilla es un ejemplo de cómo la cultura y el clima influyen en el diseño de los espacios habitables en esta región.