La romanización se refiere al proceso mediante el cual un grupo o individuo adopta características de la cultura romana, ya sea en su lengua, costumbres o forma de vida.
Este fenómeno histórico tuvo lugar principalmente en las regiones conquistadas por el Imperio Romano, donde se buscaba integrar a los pueblos locales en la civilización romana.
La romanización no solo transformó sociedades, sino que también dejó un legado cultural que perdura hasta hoy.