El Romanticismo en la literatura alemana surge en el siglo XIX, marcando una transición hacia nuevas corrientes estéticas.
Se distingue entre una fase más «vieja», con influencias medievales y figuras como los críticos Friedrich y August Wilhelm Schlegel, y poetas como Hólderlin y Novalis, y una fase «joven», impulsada por las guerras de liberación, que aborda temas nacionalistas.
Este movimiento también incluye un enfoque más místico en la poesía y los cuentos, destacando a autores como Eichendorff y los hermanos Grimm.
Romanticismo (Literatura Alemana)
A pesar de la impermeabilidad del país al influjo de escuelas determinadas, el siglo xix da entrada a las románticas. Distinguimos por un lado la más «vieja», con su orientación medieval-universal, representada por los críticos Friedrich Schlegel, August Wilhelm Schlegel (cuya traducción de Shakespeare al moderno alemán señala un importante acontecimiento poético), así como por los poetas Hólderlin y Novalis, los filósofos Fichte y Scheling y el dramaturgo y poeta Tieck. Y, por otro lado, la más «joven», estimulada por las guerras de liberación; mucha de su poesía gira en torno a motivos nacionalistas (Arndt, Uhland, Kórner, Schenkendorf); su figura más sobresaliente es el dramaturgo prusiano Heinrich von Kleist. Siguió un romanticismo más pasivo y místico en poesía y Novellen a cargo de
Eichendorffj Arnim, Brentano, Hofíman, los cuentos de hadas de los hermanos Grimm y la superior producción dramática del austriaco Franz Grillparzer.