Rorro puede referirse a un niño recién nacido que aún se encuentra en periodo de lactancia, o también a la voz onomatopéyica utilizada para arrullar a los bebés.
En México, además, se utiliza para denominar a una muñeca o a una persona con ojos azules.
Es una palabra versátil que abarca distintos significados según el contexto en el que se emplee.
"A veces, si los padres no lo tenían muy claro, el párroco sugería cristianizar al rorro con el nombre del santo del día, que rara vez coincidía con los que ya hemos comentado", Valladolid cotidiano (1939-1959) - Página 129, José Miguel Ortega - 2012.
Voz onomatopéyica empleada repetidas veces para arrullar a los niños.
Ejemplos de uso: "A la rorro niño a la rorro ya, duérmete mi niño, duérmete mi amor".
"A la rorro, niño, / a la rorro, ro; duérmete, bien mío, / que te arrullo yo".