El saco embrionario es una estructura fundamental en el desarrollo de los organismos.
Se refiere a la vesícula blastodérmica, que juega un papel crucial en las primeras etapas de la formación del embrión.
Esta estructura proporciona un entorno adecuado para el crecimiento y desarrollo celular, siendo esencial para el establecimiento de las bases de la vida.
Su comprensión es vital en campos como la biología y la medicina.