La palabra saladamente se utiliza en un contexto figurado y familiar para describir una forma de hablar o actuar que es chistosa, llena de agudeza y gracejo.
Este término evoca la idea de un humor ingenioso que provoca risa y diversión, destacando la habilidad de una persona para hacer comentarios o situaciones que resultan entretenidos y agudos.
Así, "saladamente" se convierte en sinónimo de un ingenio que alegra y sorprende.